sábado, 30 de junio de 2007

El bardo Asegurancetúrix: rasgos primarios

El bardo Asegurancetúrix o Asurancetúrix es considerado en los álbumes de Astérix como un cantante pésimo, al que un número muy reducido de personas le gusta. En Astérix el Galo, encontramos que solamente es un pesado que se dedica a entonar cantos para los guerreros, quienes los rechazan de formas variopintas. Este rasgo coincide con la idea posterior de otros álbumes de que sea un cantante inferior a los del montón. Pero más tarde, se le llama para tocar el violín en un baile que organizan en la aldea y no es nada abucheado. El personaje es aparcado hasta la última viñeta del álbum, donde canta en el banquete tocando el violín y un guerrero de la aldea le recrimina.

En álbumes posteriores será frecuente verle amordazado para que no pueda amenizar las veladas galas: atado a un árbol o colgado de él junto con lira; expuesto en la altitud de su casa, al aire libre; sentado con los otros vigilado por Esautomátix e incluso debajo de un menhir, siempre amordazado, por supuesto. Las pocas veces que ha podido cantar son escasas, por ejemplo, el banquete de despedida de Gudúrix, el sobrino del jefe o en el banquete final de El cielo se nos cae encima. Siendo este álbum considerado como un espejo de Astérix el Galo, véase la portada, parece acertado dejar que el bardo cante.

La conclusión a la que podemos llegar es que Asegurancetúrix no es gustado por su voz: "de sistro", como define Esautomátix, es decir, de carraca. Pero por lo demás, es un buen instrumentista: toca el violín, la gaita, la lira y el carnyx (género de flauta alargada con forma de animal, véase en Los normandos). En Astérix y Latraviata se demuestra que es un excelente director de orquesta. Incluso Esautomátix tolera que toque la lira pero sin cantar. De no ser por su voz de carraca, con sus conocimientos en el mundo instrumental y con su extenso repertorio de canciones, Asegurancetúrix sería llamado a cantar en los banquetes a cada II por III.
Sin embargo hay que aprender a sacar provecho de nuestros defectos, el bardo lo hace involuntariamente, ya que su voz le salvó la vida en el circo romano haciendo huir a los leones, hizo huir a los sanguinarios normandos y enseñarles lo que es el miedo, también hizo huir a los inquilinos de la Residencia de los Dioses. Uderzo le confirió la facultad de hacer llover con sus cantos, que fueron requeridos para salvar a una princesa hindú parando la sequía y que desalteraron el orden en el bosque galo haciendo huir a las legionarias romanas.

Las opiniones sobre su talento están divididas: él opina que es genial, los demás piensan que es un pelmazo. De todos modos, cuando no canta, es un alegre compañero.

viernes, 29 de junio de 2007

Los desconocidos de las aventuras de Astérix

¡Por fin! ¡Aquí está la sorpresa que os venía anunciando todo este tiempo atrás! ¡Váis a ser conocedores de una información exclusiva a los fanáticos de Astérix! Se trata nada más y nada menos que de los personajes que René Goscinny anotaba en sus sinopsis pero que no vieron la luz, al no salir en los álbumes. Pondremos algunas suposiciones sobre quienes podrían haber sido esos personajes, así que seguid opinando.


Ordenaremos los personajes por libro, clasificándolos según sus nacionalidades:

Astérix el Galo:
  • Galos: Souletropix (bien podría haber sido el mercader de bueyes desconocido).
  • Romanos: Numa Gugus y Tiberius Quadrilius.
Astérix gladiador:
  • Galos: Derdedix y Esoterix
  • Romanos: Claudius Yadlabus
La vuelta a la Galia:
  • Galos: Suffix, Anthropométrix, Védoublevéix
  • Romanos: Caius Cactus
Astérix y Cleopatra:
  • Egipcios: Cincécinkdis y Tourdepis
El combate de los jefes:
  • Galos: Algébrix
Astérix y los normandos:
  • Normandos: Staf
Astérix legionario:
  • Galos: Dansritmix, Electronix, Rachitix, Copoclefilix, Acidacetix.
  • Godos: Pleinebaric
  • Bretones: Contumax
  • Egipcios: Sansunmaravedis y Petifis
  • Belgas: Nonantesix
  • Romanos: Quilmorus
Astérix en los Juegos Olímpicos:
  • Griegos: Kristmas, Natifdaras, Prefas, Olegoras, Anthène, Rondebos y Bogos.
  • Romanos: Gracchus Humus
Astérix en Hispania:
  • Hispanos: Collodion et Contagion, Horion et Brimborion, Oignon et Troignon, Tromignon et Brimborion, Lorgnon et Voyon y Gnon et Contusion
La residencia de los dioses:
  • Romanos: Palaidunégus.
  • Romanas: Claudia, Nignia, Arria, Sulpicia y Calpurina.
Astérix en Córcega:
  • Romanos: Mabelandalus, Impromptus y Minibus.
Obélix y Compañía:
  • Galos: Propédeutix.
Estos son todos los nombres que no correspondían a ningún personaje, pero aquí vamos a ver 4 personajes nombrados en los guiones pero no en el álbum:

En Astérix y Cleopatra, podemos ver a un romano catapultado por error al palacio de la reina Cleopatra, en la página 42, con el nombre de Facteurhésus. Facteurhésus creo que era un personaje pasajero de Goscinny sin demasiado éxito que no llegó a publicarse en álbum.

En Astérix en Hispania, el galo susceptible con el que se encuentran Astérix y Obélix en la caravana que cruza a Hispania se llamaba Plantaromatix.

En Astérix en Helvecia, el sufrido romano que escala toda la montaña cogido de la mano de Obélix se llama Hiatus.

En La gran travesía, uno de los miembros de la expedición vikinga (el único en no ser nombrado), que aparece en la página 36 se llama Øligøcen, el nariz roja.

Espero
vuestros comentarios y que os haya gustado la sorpresa.

domingo, 17 de junio de 2007

Realizar un álbum de Astérix en tres fases.

Esta entrada tratará sobre la realización de un libro de Astérix. Su desarrollo se rige por tres fases que detallaremos a continuación:


- Antes que nada, se tiene que encontrar el tema general de toda la aventura. René Goscinny discutía con Uderzo y empezaban a imaginarse una historia. René se metía manos a la obra, tomando apuntes, reflexionando, etc. Cuando el tema ya estaba más o menos definido, se disponía a trabajar con su máquina de escribir Royale para dar paso a la sinopsis.


1º: La sinopsis consiste en un resumen generalizado de la historia en 44 páginas, constando de un párrafo en la sinopsis una futura página del álbum. Se modela el argumento, se introducen los personajes, se ordenan las situaciones y los gags y por supuesto, el humor. El humor también estaba presente en el proceso de trabajo, ya que René dirigía notitas amistosas a Albert; por ejemplo, en la de Astérix y Cleopatra se puede ver en el título: "Une superproduction en Uderzorama et Goscinnyscope". Aquí podéis ver, en francés, la sinopsis de Astérix y Cleopatra.

2º: El argumento ya está constituido. Ahora hace falta precisar los detalles que formarán toda la parte argumental. Goscinny siempre distribuía su página en dos columnas, una para las acciones de los personajes, los decorados, etc. y otra para los diálogos. Es en esta fase en la que René introduce las parodias, las alusiones, los juegos de palabras y demás, factores que dan a la aventura la riqueza por la que se caracteriza. Un ejemplo de la 1ª página de Astérix el Galo, la histórica viñeta 8, en la que sale Astérix por primera vez. Seguramente habréis cogido vuestro ejemplar de Astérix el Galo y habréis contado las viñetas. Diréis, en la que sale Astérix por primera vez es la 7ª. Pues no, es la 8ª. He aquí el por qué: las páginas eran subdivididas en 12 viñetas, 3 columnas y 4 filas. La de más arriba sería la de la 1ª página de Astérix el Galo, siendo la citada viñeta la 8ª, y si alguna tenía tamaño doble, pues 11-12, 9-12 (a lo alto), etc.

3º: Goscinny ya puede descansar (si sus otras series le dejan tiempo), ya que ahora es tarea de Albert Uderzo dedicarse al dibujo, dando vida al fascinante mundo de Astérix mediante sus trazos mágicos. Después ya estará lista la aventura para ser coloreada y publicada en álbum.

Después de la muerte de Goscinny, fue Uderzo quien se encargaba de pasar por todas las fases por las que pasaba Goscinny intentando conservar su espíritu pensando en determinados momentos: "¿Cómo seguiría ahora René...?". Uderzo no ha querido nunca rodearse de guionistas, sino realizarlos él mismo; también ha dejado claro en su testamento que Astérix y su guionista-dibujante morirán juntos. Sólo podemos esperar que Uderzo viva por muchos años más y que nos permita disfrutar lo máximo posible del héroe galo.





sábado, 16 de junio de 2007

La Guerra de las Galias: Vercingétorix derrotado


En esta entrada vamos a tratar sobre la famosa derrota de Vercingétorix en Alesia, tratada varias veces en los álbumes de Astérix, generalmente con humor. La serie de Astérix comienza con la reciente conquista de las Galias por Julio César el año 50 antes de Cristo, un año después del fin de la Guerra de las Galias. Vercingétorix "depone" sus armas a los pies del César.

Fue durante el Concilio del bosque de Carnutes cuando se proclama el levantamiento general de la Galia, en donde Vercingétorix adquiere la confianza y el apoyo de los jefes galos (reyes y aristócratas) y donde se impone rápidamente como la persona con más condiciones para llevar adelante la coalición (debido a su conocimiento de las técnicas de guerra galas y romanas). Sin embargo, al volver a su ciudad natal de Nemossos para reivindicar su título de jefe por derecho filial, se topa con la oligarquía arverna (que su padre había favorecido para instalar un poder personal "a la antigua" en el lugar), y con su tío paternal Gobannitio a la cabeza. Éste probablemente había sido el responsable de la ejecución del padre de Vercingétorix, por lo que al regreso del ahora jefe galo fue expulsado en el acto de la ciudad.

En cuatro años de guerras incesantes, César había conquistado, para Roma, en el oeste, más vastos territorios que los que anexionar en las regiones del este. Pero apenas se retiró César hacia la Galia cisalpina, los belgas se sublevaron (53 a.C.) al año siguiente, la Galia se levantó en masa, acaudillada por Vercingétorix, que deseaba una nación libre y unida.

En enero del año 52 adC, habiendo tomado las armas contra César, intenta imponerse a los Eduenos (pueblo galo de Saona y Loira, aliados a los romanos) e inspira una unión de los pueblos del centro y del este de la Galia contra el procónsul.

En vez de presentar batalla campal a los romanos, cuya superioridad militar en táctica y en armamento los hacía prácticamente invencibles, los extenuó antes del golpe decisivo. Cuando César iba a atacarlo, el rebelde se retiró lentamente, incendiando y arrasando, a su paso, las aldeas y los campos. Así, alejaba cada vez más a sus enemigos de sus bases de operaciones, y dificultaba su abastecimiento. Pero Julio César logró tomar la ciudad de Avaricum (Bourges) que no había sido quemada, para luego marchar sobre Gergovia. Tal y como se describe en los Comentarios sobre la guerra de las Galias de Julio César, Roma había asegurado sus dominios sobre las tribus celtas más allá de la Provincia Narbonensis (en la actual Provenza a través de una estrategia de "divide y vencerás". Vercingétorix hábilmente unificó las tribus, adoptó la política de retirarse hacia fortificaciones naturales y empleó de una forma simple la técnica de la"tierra quemada", quemando ciudades para evitar que los romanos pudieran vivir de los productos locales. Sin embargo el talento y la inteligencia estratégica de Julio César le permitió a los romanos triunfar contra la coalición gala, ya que gracias a los pactos que realizó con algunas tribus galas para atacar a otras, se hizo de la ayuda logística de los pueblos galos boii, remi (Reims), y de los eduenos que desde hace tiempo eran reticentes a someterse al jefe arverno.

La lucha de las legiones republicanas romanas lideradas por Cayo Julio Augusto Cesar contra el pueblo galo fue ímproba y dura, y en ella César sufrió algunos reveses. Entre las victorias de César se cuentan la toma de la ciudad de Avaricum (Bourges) seguida del exterminio de 40.000 de sus habitantes (las mujeres jóvenes y los niños fueron enviados como esclavos a Roma). Así el romano, al cabo de doce meses, cercó a Vercingétorix en el oppidum de Alesia. Los galos reunieron -según las fuentes romanas- un ejército de más de 200.000 hombres, que atacaron a los sitiadores (entre los que se contaban germanos aliados de Roma contra los galos, estos germanos eran jinetes ubios, de la Alemania central montados con caballos de la tribu aliada de los remos, del este de la Galia Comata) estrellándose contra el tremendo sistema de fortificaciones romanas, que en este suceso particular tenía la forma de doble anillo que rodeaba a la ciudad, con un muro interior para contener a la guarnición auverna y un perímetro defensivo exterior para protegerse de los ataques externos. El ejército galo fue derrotado y Alesia debió rendirse por hambruna. Como sus compañeros se negaron a matarle, Vercingétorix vistió su más rica armadura, montó su caballo de batalla, fue hasta el campamento de César, y arrojó a los pies del romano su espada, su casco y su venablo, en señal de rendición. Fue encarcelado en el Tullianum en Roma durante cinco años, antes de ser expuesto públicamente.

miércoles, 13 de junio de 2007

Astérix y los Juegos Olímpicos

Astérix y los Juegos Olímpicos, antes de ser publicada en álbum, fue publicada en la revista Pilote, desde el número 434 hasta el 455. Se empezó a publicar el 15 de febrero de 1968, con motivo de los Juegos Olímpicos de invierno de Grenoble de ese mismo año. ¿Y qué menos que conmemorar una Olimpiada con una magnífica y suntuosa aventura de Astérix? Llena de acción, magníficos monumentos y de mucho humor.Todo empieza un buen día en el que el recién incorporado a las aventuras de Astérix Edadepiédrix, oye unos gritos de alegría en el campamento romano de Aquárium. Tal escándalo se debe a la participación del legionario Claudius Mulus en los Juegos. Tras llegar la noticia a la aldea, Astérix y Obélix van a dar una vuelta por el bosque y se encuentran al atleta romano entrenándose. Ya se sabe que un romano con un galo de la aldea de los irreductibles no es muy buena mezcla, y tras un malentendido, Obélix y Mulus terminan mal, mejor dicho: Mulus termina mal. Llega deprimido al campamento y le coge afición a la escoba.

El centurión Tulius Borricus va a la aldea gala a decirle al jefe Abraracúrcix que dejen tranquilo a Mulus para entrenarse a los Juegos Olímpicos. Los irreductibles galos también quieren participar pero se enteran de que sólo pueden participar griegos y romanos. Astérix llega a la conclusión de que también son romanos por estar en un país conquistado. Así pues, deciden ir a los Juegos y escogen a Astérix y a Obélix como atletas representantes.

Una vez allí, tras una estancia en Atenas, viajan a Olimpia, donde Astérix y Obélix esperan ganar gracias a la poción mágica, pero algo ocurre. Esto es comunicado a los magistrados olímpicos y prohiben terminantemente el uso de poción mágica. Por tanto, Obélix no participará en los Juegos y Astérix lo hará pero sin poción.

El día de la carrera, Astérix no queda mal, venciendo los espartanos. Los magistrados deciden organizar una carrera participando sólo los atletas romanos, Astérix inclusive. Panorámix proclama a voces que la poción mágica está guardada en una cabaña que no cierra bien y que no está vigilada. Los atletas romanos hacen uso de ella y el día de la carrera, los atletas romanos llegan a la vez a la meta. Panorámix hace una reclamación de última hora, alegando que los atletas romanos han bebido poción a la que le puso un colorante, por el que todas las lenguas de los atletas romanos se han vuelto azules. Se decide entonces dar la victoria a Astérix. Finalmente, éste tiene un gesto de buena voluntad hacia su rival y le da su palma para presentarse ante César con honor.

¿Queréis conocer cómo es el barco en el cual los galos viajan a Grecia? Unas imágenes sorpresa os ayudarán a imaginaroslo:
























Hay que reconocer que este es un magnífico álbum de Astérix, en el argumento y en el dibujo. Los dibujos de Uderzo de la Acrópolis, del Partenón y de más de media página dedicada a mostrar los edificios de Olimpia son excelentes. También destaca la primera aparición de Edadepiédrix, llamado Vegestórix, quien despierta su lado más juerguista y transnochador. Por primera vez, Goscinny y Uderzo se caricaturizan en su propio álbum, en un bajorrelieve: déspota y tirano. Yo le pongo 5 estrellas. Además, se está preparando una versión con actores reales prevista para 2008, de la que hablaremos otro día.



viernes, 1 de junio de 2007

Misión: bautizar a uno de los perritos más famosos del cómic

A ver, a ver. Vamos a comentar aquí los secretos del nacimiento de Ideáfix. Todo empezó con la apuesta que hizo Astérix al inspector general Lucilius Flordelotus: nada más y nada menos que dar la vuelta a la Galia. Pues bien, en una de las etapas del largo periplo, en Lutecia, la congestionada capital cuya especialidad es el jamón.

En la sinopsis de la historia, en 1963, René Goscinny no había introducido un pequeño perrito. René y Albert se pusieron de acuerdo para poner un perrito en la aventura que acompañara a nuestros dos héroes. Para hacerlo, tuvieron que desechar todo el trabajo avanzado por un pequeño detalle, a causa del detallismo de René.

Pues bien; ya con la sinopsis rectificada René Goscinny escribe:
PLANCHA 9/VIÑETA 9: Entran los dos en un negocio con un rótulo: "Charcutería - Ultramarinos". En la puerta se encuentra un perrito. (Pág. 13 del álbum
). Cabe destacar que esta última frase se encuentra subrayada en el guión de Goscinny, cosa rarísima en sus guiones. Esto nos hace presentir que se va a producir un gran acontecimiento y quiere que Uderzo le dé la importancia que quiere que adquiera el pequeño perrito.

A partir de esta viñeta, sistemáticamente por toda la aventura, René le recuerda a Albert que el perrito tiene que seguir a Astérix y Obélix durante toda la aventura. Por tanto, en esta aventura Ideáfix sólo resulta una mera comparsa cuyo único momento en el que destaca es en las tres últimas viñetas del álbum. En las que dice "¡Guau!" a Obélix, quien se gira y le da un hueso. Inicialmente, era Astérix quien asumía el papel de dárselo, pero Obélix dibujó a Obélix haciéndolo.

Pues bien, ya tenemos el perrito pero, ¿cómo se llamará? Las mentes de Goscinny y Uderzo concibieron una idea: bautizar al perrito organizando un concurso para los lectores de Pilote. Así pues, en el número 209 de Pilote se publica el concurso para otorgar nombre al perrito, como diría Patapalo: "Vox pópuli". Podría haberse llamado Patracourcix, Papeurdurix, Trépetix, Paindépix, Toutousanprix o Minimix. Cuatro lectores propusieron Idéfix (en el original francés), y pueden presumir de haber bautizado a uno de los perros más famosos del cómic Hervé Ambroise, de Yarville (Meurthe-et- Moselle), Dominique y Anne Boucard, de Niort (Deux-Sèvres), y Rémi Dujat, de París. ¿Pero qué quiere decir "Ideáfix"? Pues que tiene la idea fija de seguir siempre a nuestros dos amigos galos y sueña siempre con comer grandes huesos (Pilote nº 216).

Ideáfix será llamado por su nombre en la siguiente aventura; Astérix y Cleopatra.